El método mínimamente invasivo Milos

Cuando se reparan hernias umbilicales, incisionales o de la pared abdominal mediante el uso de técnicas mínimamente invasivas, las mallas sintéticas suelen colocarse en la cavidad abdominal. Esto no solo puede provocar reacciones a cuerpos extraños, sino que también entraña el riesgo de que la malla forme adherencias con las asas intestinales y, en consecuencia, de que se produzcan complicaciones muy graves o dolores muy intensos. Y, con frecuencia, es preciso realizar una nueva intervención.

El Dr. Wolfgang Reinpold, médico jefe del departamento de cirugía y director del Centro de hernias del hospital Groß-Sand de Wilhelmsburg, Hamburgo, ha desarrollado un método quirúrgico en el que las mallas sintéticas se implantan fuera de la cavidad abdominal a través de incisiones extremadamente pequeñas, por lo que, al no estar en contacto con él, la malla no puede formar adherencias con el intestino. El llamado método MILOS combina las ventajas de la cirugía de ojo de cerradura con las de la técnica abierta.

¿En qué consiste la operación?

Con el paciente bajo anestesia general, se realiza una pequeña incisión y se introduce a través de ella una cámara y el instrumental necesario. A continuación, se retira el peritoneo que presenta protrusión y, después, se vuelve a coser. Acto seguido, la malla se despliega y se fija con ayuda del instrumental endoscópico fuera de la pared abdominal, es decir, entre el peritoneo que rodea las vísceras y el tejido conjuntivo. Por último, el orificio herniario se vuelve a cerrar por encima de la malla sintética. Al final, solo queda una cicatriz diminuta.

Adjunta puede ver una pequeña animación del método MILOS.

Haga clic aquí para ver informes televisivos sobre el método MILOS y una entrevista con el Dr. Reinpold.

Ventajas del método MILOS:

Incisiones pequeñas

  • Dolores notablemente más reducidos tras la intervención que en otros métodos quirúrgicos establecidos
  • Menor riesgo de complicaciones, como hemorragias, inflamaciones o lesiones en otros órganos
  • Excelente recuperación de la función de la pared abdominal
  • Buen resultado estético
  • Riesgo notablemente menor de recidivas (hernias de repetición)
  • Alta hospitalaria más rápida 
  • Reanudación de la actividad rutinaria con prontitud
  • Posibilidad de realizar actividades deportivas tan solo 1 o 2 semanas después de la intervención

¿Quién puede operarse con el método MILOS?

Como cualquier tratamiento médico, el método MILOS tampoco resulta igual de apropiado para todos los pacientes. Así pues, antes de proceder a la cirugía, es preciso realizar una exploración minuciosa del paciente y emitir un diagnóstico exacto que, por supuesto, también tenga en cuenta otras posibles enfermedades concomitantes. Tomando como base los datos obtenidos y en función del caso concreto de que se trate, se determina es posible realizar una operación mínimamente invasiva o si la intervención abierta representa la mejor opción y, a continuación, la decisión se le explica con detalle al paciente.

Las siguientes situaciones iniciales no resultan apropiadas para el método MILOS y, por lo tanto, representan las llamadas contraindicaciones:

  • Hernias gigantes con una protrusión muy grande
  • Hernias incisionales (laterales) de gran tamaño
  • Hernias incisionales con cicatrices grandes y amplias
  • Presencia de adherencias extremas entre las vísceras y la pared abdominal
  • Hernias en las que el tratamiento seguro solo está garantizado con una incisión más grande

Aseguramiento externo de la calidad

Logo Herniamed

Los cirujanos que operan según el método MILOS participan en el aseguramiento externo de la calidad del Registro alemán de hernias Herniamed. La sociedad fundada en el año 2009 se basa en un estudio de aseguramiento de la calidad basado en Internet en el que los médicos que realizan reparaciones herniarias pueden registrar sus operaciones conforme a un estándar científico consolidado. Además, se realiza un seguimiento de los resultados de las intervenciones durante un periodo de hasta diez años, lo que garantiza que también se rastrean de forma segura los problemas que pueden aparecer a largo plazo. Tomando estos datos como base, los cirujanos especialistas pueden lograr óptimos resultados terapéuticos para sus pacientes.